Antes tú me llamaba al iPhone

Antes tú me llamaba al iPhone, cuando necesitaba amor, cuando la ciudad ardía en tus entrañas y te preguntabas donde descargar tu frustración. Me decías que jamás podrías amar a alguien como yo, y aún así amanecías acurrucado en el hueco de mi axila, babeando mi pecho y en la madrugada me despertabas sólo para platicarme tus sueños. Luego en la mañana, te ponías los pantalones y te ibas, como si fuera yo un juguete anti-estrés, me decías por whatsapp hay que mantenerlo casual, pero cómo se detiene al amor. Antes tu me llamaba al iPhone, cuando necesitaba amor, llámame al iphone. Desde que dejé la ciudad tú me tienes triste, sales con gente que nunca conocí y llenas tu instagram de experiencias que contigo jamás compartí. Me haces sentir una extraña dentro de el espacio que solía ser de los dos, de mi cama llena de ti. Te la pasas intentando complacer a gente que conoces de hace un mes, me dejas en visto, me dices que insisto cuando solías llamarme a mí. Hasta ahora entiendo que existen dos personas adentro de ti, y a la que hace check-in en cada lugar es a la que no la conozco. Antes tú me llamaba al iPhone, cuando necesitaba amor, cuando tenías el corazón partido en dos, y el sentido de la existencia te parecía menos que una vil coincidencia, una jugarreta del destino a la que ya no prestabas atención. Luego te preparabas un café cargado en mi cocina y veíamos la tarde pasar a nuestro alrededor, hasta que las sombras inundaban el departamento y te levantabas para marcharte, me acariciabas la cara y me decías, que pasara lo que pasara jamás podrías amar a alguien como yo.